No es casual que uno de los regidores de Tierra y Libertad fue presionado a no firmar el Pacto de Gobernabilidad por Lima
Bellacos revocadores
Martes, 26 de noviembre de 2013 |
Quiénes ganaron y quiénes perdieron este domingo.
Sería ingenuo pensar que el repudio del domingo contra Marco Tulio Gutiérrez solo era por tener que votar otra vez, pues el tema de fondo es la creciente sensación ciudadanía de haber sido embaucada en un proceso que no tenía que ver con Lima sino con intereses particulares.
Sería injusto, sin embargo, descargar la indignación solo contra Gutiérrez, pues él solo fue mascarón de proa de la revocatoria de un combo compuesto por entes con intereses diferentes pero confluyentes en la voluntad de vacar a la alcaldesa.
Ahí estaban el Apra para hacer ‘calistenia electoral’ y ayudar al ‘entenadito’ de Alan García, el ex alcalde Luis Castañeda de Solidaridad Nacional, quien, a su vez, buscaba evadir responsabilidades penales. Además, estaba un grupo mafioso de transportistas y comercializadores de alimentos en defensa de sus prebendas en las rutas y en La Parada.
Es obvio que la gestión de Villarán tuvo serios problemas de arranque que no se llegaron a corregir del todo, y que la revocatoria está prevista en la ley. Pero el intento de vacarla fue un abuso de esa ley poniéndola al servicio de fines subalternos que nada tenían que ver con el interés de la población limeña.
Luis Bedoya Reyes recogió ese sentimiento: “Tenemos que sancionar a los bellacos que nos han conducido a este final de tener que venir aquí tras la revocatoria y los revocadores no están presentes. No había un interés político o beneficio para la ciudad, sino ganas de venganza política”.
En efecto, tras empujar la revocatoria, ni el Apra ni Solidaridad inscribieron una lista para la elección del domingo y Castañeda hasta se mandó mudar a Madrid y ni votó. Pierden, por ello, ambos partidos pues su juego quedó escandalosamente desenmascarado.
También pierde, por supuesto, Villarán, quien tras la revocatoria de marzo y la votación de ayer ha quedado aislada. Gran parte de la responsabilidad es suya por no articular, como fue el mandato de marzo pasado, una alianza con el PPC.
Asimismo, por haber cedido al impulso sectario y radical de Marco Arana y su Tierra y Dignidad, quien con arrogancia suicida petardeó el acuerdo al costo de perder a algunos de sus mejores integrantes.
Ganan, en cambio, el PPC que se fortalece en el municipio pero, principalmente, Somos Perú que ha pasado a ser una agrupación relativamente relevante.
Gana, también, el sistema electoral pues esta vez sí trabajaron juntos –por primera vez en mucho tiempo– el JNE, ONPE y Reniec, un mérito de Francisco Távara, cuya actitud es distinta a la de sus predecesores.
Pierde, finalmente, la ciudad que fue perjudicada por unos revocadores que –hay que reconocerlo– sí fueron exitosos en dañar a Lima.
Fuente: http://www.larepublica.pe/columnistas/claro-y-directo/bellacos-revocadores-26-11-2013#comment-form
MovimientoVerde.com
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